top of page

Lo Indispensable hoy y siempre

He caminado demasiado por el asfalto o los fríos adoquines, como para saber que prefiero el crujido de las hojas bajo mis pies, o el tacto absorbente del barro. Prefiero apartar ramas a mi paso que esquivar latas en el suelo, escojo perderme escuchando un pájaro antes que distraerme en la hilera de escaparates invitándome a una vida populosa.

Hace mucho que no me compro unos zapatos, que no reviso mi corte de pelo, hace un tiempo que mis camisas no se ajustan al canon de la moda. Pero hace poco que he respirado aire puro, que he charlado con un árbol, que a mi paso saltaron los corzos, que un zorro me guiñó el ojo al escoderse tras una roca. Hace sólo unos instantes que decoré mi pelo con unas hojas y bailé en el bosque, acompañada del crujido de los álamos sacudidos por el viento y de un par de libélulas que se unieron a mi coreografía silvestre.

Cada vez me apetece ser más agreste, disfrazarme menos. Ya no quiero aparentar que mido ocho centímetros más, ni molestarme porque la lluvia moje mi pelo, no soporto oprimir mi rostro tras una máscara de color perfecto. Hoy, por fin, para mi, la belleza habla de atenderse por dentro. Prefiero decorarme de tierra que ensuciarme de carmín.

Vivo con un poco menos de todo lo material, no tengo televisor, pero doy largos paseos junto al rio. Trabajo al aire libre, al ritmo que marcan los ciclos y en lugares propios de cuentos. Ya no veo tan a menudo a mis amigos, pero cuando lo hago, hablamos de las cosas importantes, para escrudiñar la vida de los demás ya no hay tiempo. Ya no entro en locales con música ensordecedora, ya no hago colas para comprar productos modernos.

Hoy encontré un lugar en mí para la coherencia, para amarme y sentirme capaz, para darme el permiso de ser auténtica. En este espacio sagrado, hay una cavidad para que otros me amen, pero también para que me rechacen y poder seguir con mi camino sin acritud ni desprecio.

Y mientras se debate en el Universo, si salvar a la raza Humana o dejarnos a nuestro extinguir, yo, seguiré yendo al Bosque a cuidarlo, a cuidarme, a cuidarnos.

Feliz existencia hoy y siempre.

©Noelia Velasco

Entradas destacadas
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
No hay tags aún.
Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
bottom of page