El Más Grande Organismo Vivo

"Una vez, alguien trató de rebatir la idea de que los árboles son los seres de mayores dimensiones del Planeta, aduciendo que ciertos hongos subterráneos de los bosques, tenían sus micelios unidos a lo largo y ancho de la superficie arbolada, y que por consiguiente esos eran los seres u organismos de mayor tamaño. La reacción no se hizo esperar en el mundo científico: si un hongo que une a todos sus individuos se le considera un ser por sí mismo, el bosque debía de ser considerado del mismo modo, ya que todas las raíces y copas de sus componentes crecen de manera solidaria y sinérgica bajo la superficie y sobre ella. De este modo acababan de nacer los organismos de mayores dimensiones que, con mucha diferencia, existen y han existido en la Tierra: los bosques. Incluso se podría hacer otra definición más exacta: los bosques con todos sus moradores vegetales, animales … ¡y fúngicos! (los hongos mencionados)". Y aún podríamos ir más allá, y seguir derribando falsas barreras o fronteras, ¿y si todo lo que yace sobre el planeta y se oculta bajo su tierra formamos también un solo ser? Cuando no físicamente, todo y todos estamos interconectados a través de nuestros átomos, esos cuerpos menos densos, aunque aún con cierta densidad, que también forman parte de nosotros, nos definen y nos susurran nuestra atemporalidad. Estos, se mezclan en la falsedad del vacío, pues todo está ocupado en este universo. En este entendimiento, nosotros seríamos el bosque, pero también el río, el mar, los desiertos y las montañas, incluso las ciudades y los vertederos; y sí, en esta profundidad de comprensión, somos Gea, la Tierra. Una vez leí: “Los Seres Humanos no pueden existir si eliminan todo lo que es desagradable en vez de comprenderlo”, en tanto a esta certeza, la unión con todo es la respuesta a todas nuestras preguntas, inclusive a las más complejas. Por eso, cuando cuidamos de nosotros mismos, como consecuencia, cuidamos de todo lo que nos rodea, sin límite de distancias ni tiempo. El árbol que en consideración miramos, se revitaliza, y esta forma de mirar se vuelve de Ser a Ser, una reciprocidad enaltecida por el vínculo que se vuelve sagrado, íntimo e increíblemente bello. Del Mundo Vegetal, se desprenden todas las lecciones que el Humano está por integrar en sí mismo, las de convivencia, las de respeto, las de generosidad, las de igualdad, las de alimentación, las de espiritualidad. El Bosque es mucho más que un organismo vivo, es un Ser en sí mismo y de él se desprenden en perfecta y sublime simbiosis, los árboles, las plantas, los animales y en contadas ocasiones, el mismo hombre. Estamos llamados a comprender, de ningún modo a competir.

©Noelia Velasco